Recordar hoy puede convertirse en una trivialidad o en una necesidad. Personalmente, soy del parecer que el recuerdo es una terapia preventiva y sanadora en tiempos de oscuridad y violencia. Recordar colectiva e individualmente es un antídoto, aunque también es campo de lucha de diversos sectores, ante la indiferencia moral, ante los olvidos impunemente impuestos.No desconozco el valor y la necesidad subjetiva de ciertos olvidos, solo resalto la importancia decisiva para nuestros países del recuerdo como un imperativo social, histórico y político. Este blog se propone precisamente ser un espacio para ese deber del recuerdo. Deber latinoamericano, deber como ciudadanos de comunidades nacionales con pasados traumáticos y violentados.
Improbables muertes de Albert Camus
Hace 3 meses